El alza del flete de contenedores marítimos afecta negativamente a todo el mundo y al país con la elevación de precios de productos y reduciendo la oferta de productos importados. Bolivia realiza grandes importaciones de China, de allí se importa más del 90 por ciento de los juguetes, autos, celulares, barbijos y otros productos, por lo que la llegada de los mismos será afectada.
La agencia de comercio y desarrollo de la ONU (Unctad) advirtió que los precios de importación podrían subir un 11 por ciento internacionalmente y los precios al consumidor en un 1,5 por ciento hasta 2023, por el incremento de las tasas del transporte marítimo. Esta situación además implicaría una inflación de los precios para los consumidores, salvo que se resuelvan los problemas en las cadenas de suministro generados por la pandemia.
El flete de contenedores marítimos se elevó hasta en 600 por ciento y el tiempo de espera para encontrar uno es de uno a tres meses. Antes de la pandemia, los importadores pagaban 2 mil dólares por traer un contenedor de China, pero ahora les cuesta hasta 18 mil. Esta crisis provocó en muchos países la escasez de varios productos y la elevación de precios.
El gerente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Gustavo Jáuregui Gonzales, aseguró que el costo final (con incremento) siempre será trasladado al consumidor. “No es una buena noticia para nadie, esto ha traído efectos contrarios y distorsiones del mercado. Hay un retraso en la distribución de mercancía en diferentes partes del mundo. Muchos productos no tendrán el nivel de abastecimiento en algunos países. La pandemia ha cambiado el comercio exterior a reacomodado todo”, dijo.
En tanto, el presidente de la Cámara de Industria, Comercio y Servicios de Cochabamba (ICAM), Ramón Daza, considera que la llegada de electrodomésticos disminuirá y el precio de éstos se elevará.
La crisis de contenedores afecta a Bolivia porque el país depende de los productos importados de China. Nueve de cada 10 juguetes importados son chinos, al igual que el 98 por ciento de los artículos navideños.
Los comerciantes señalan que en esta gestión llegó poco juguete. Los precios se elevaron y no hay novedades. “Si antes se vendía un juguete en 120 bolivianos, ahora se vende a 180. Hay muy poco producto nuevo por los problemas de transporte a China.
Eso ha causado que no lleguen juguetes grandes. Eso se debe a que son más caros y representa mayor inversión para los mayoristas, tampoco la población tiene ya la condición económica para pagar”, dijo Gonzalo Alcón, comerciante de juguetes del mercado La Paz.
A eso se suma que en Puerto Arica todavía hay restricciones para los comerciantes mayoristas que lleguen a comprar mercadería, señaló el comerciante.
Por otro lado, Jauregui indicó que la situación también afecta a la producción e importación de vehículos, debido a que por la pandemia muchas empresas chinas desaceleraron sus niveles de producción y otras declinaron muchas líneas de producción para fabricar artículos necesarios para la lucha contra la Covid-19.
“Hay fabricantes de autos que han destinado una línea de producción a fabricar respiradores y hay ausencia disponibilidad de vehículos. Al desacelerarse en China, y otros mercados, se genera un retraso en la distribución de mercancía en diferentes partes del mundo”, dijo.
Para el gerente de la CNC, esto también afecta la producción nacional, pues hay varias industrias que importan insumos, tecnología o maquinaria. “La Organización Mundial del Comercio (OMC) ha señalado que debe haber resiliencia económica, se debe buscar alternativas ante estos conflictos, alternativas al comercio de China o de Asia”, indicó.
La Cámara Nacional de Exportadores de Bolivia (Caneb) informó que las cargas de exportación también tienen problemas para salir del país y el tiempo de espera para encontrar un contenedor es de por lo menos un mes, por lo que su envío se complica.
En cambio, la exportación de minerales no tiene esas complicaciones, debido a que no requiere contenedores para su traslado.
LA PANDEMIA AFECTÓ LA CADENA DE SUMINISTROS
REDACCION CENTRAL
Las cadenas de suministro globales se vieron sometidas a una demanda sin precedentes desde la segunda mitad de 2020 debido a que los consumidores preferían gastar en bienes en vez de servicios durante los confinamientos causados por el coronavirus, indicó agencia de comercio y desarrollo de la ONU (Unctad).
Esto causó saturación de la capacidad de carga de los buques, falta de contenedores y de mano de obra y congestión en los puertos.
Los contenedores se encuentran donde no deberían estar. Expertos estiman que esto se regulará recién en 2023.
Instituciones nacionales indican que se puede ver esto como una oportunidad para retomar actividad comercial con países vecinos.