Obispos: «Es hora de cumplir las promesas de gobernar escuchando de verdad al pueblo»

Los Obispos de Bolivia, en el Mensaje al Pueblo de Dios, se refirieron a la situación social que atraviesa el país, con un llamado al diálogo, consenso en miras de una sociedad «unida, fraterna, justa y solidaria».

“Consideramos que es hora de cumplir las promesas de gobernar escuchando de verdad a todos los sectores del pueblo; en particular, a los que están afectados, instaurando un diálogo serio, transparente y abierto que genere respuestas equitativas y consensuadas en las instancias pertinentes”, dice el Mensaje de los Obispos.

Asimismo, indica que para ese objetivo son necesarias “señales concretas y viables de buena voluntad de parte de las autoridades constituidas en respuesta al clamor de los sectores involucrados”.

“Lo que invertiremos en la escucha y reconocimiento del otro ayudará a poner esfuerzos comunes que permitirán avanzar hacia una identidad boliviana que aúna a regiones, culturas y pueblos”, afirma el pronunciamiento.

En el mensaje, los Obispos mencionaron hechos preocupantes como la pandemia que sigue trayendo luto a la familia boliviana.

PREOCUPACIÓN POR LEYES APROBADAS «SIN CONSENSO»

También expresan preocupación por la “promulgación de proyectos y leyes de dudosa constitucionalidad, hechas sin el adecuado estudio, consenso y socialización, como debe ser en un estado de derecho y democracia plena”.

Indicaron que este tipo de promulgación de leyes está causando reacciones diversas, ante las cuales manifestó que “no puede ser una respuesta el llamado a la confrontación en la calle, enfrentando hermanos contra hermanos”.

Advirtió que esa confrontación genera dolor, heridas y muerte, además de odios y resentimientos que tardarán años en ser superados.

En ese marco, los Obispos valoraron que se haya anunciado la abrogación de una de estas leyes cuestionadas.

OTRAS INQUIETUDES

Otro problema preocupante, según los Obispos, son los avasallamientos de grupos violentos a parques, reservas protegidas, tierras comunitarias y privadas, violando los derechos humanos de grupos y personas. Exhortó a que estos hechos no queden en la impunidad,

“La ausencia de Estado incrementa el riesgo de que surjan grupos irregulares con posibles vínculos con el narcotráfico”, alertaron al respecto.

Asimismo, los Obispos llamaron a no ser indiferentes a hechos como “violaciones, ultraje en contra de menores de edad y mujeres que llega al extremo del feminicidio, abandono y maltrato infantil, infanticidio y atentados a la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural”.

Consideraron que estos delitos contrarios a los valores humanos y cristianos son más reprochables porque son perpetrados en contra de vidas inocentes ante la indiferencia o complicidad de quienes están llamados a defenderlas.