En el país existe un 71% de mujeres que tienen detención preventiva, es decir que 7 mujeres de cada 10 están detenidas en las cárceles del país sin una sentencia, y que solamente el 3% tiene un dictamen, reveló una investigación de Jannett Oporto, titulada, “Mujeres Privadas de Libertad: Las más expuestas y vulnerables a la violación de sus Derechos, en el contexto de la Pandemia por la Covid-19”.
“En este escenario, lo que llama la atención y dice mucho del sistema penitenciario de Bolivia es que de las 1.072 privadas de libertad, sólo 304 cuentan con sentencia; 768 mujeres (el 71%) se encuentran con detención preventiva y ni la emergencia de la COVID- 19, como se verá más adelante, fue aprovechado para excarcelarar a esta población vulnerable”, señala parte de la investigación.
En un contacto con Brújula Digital, la investigadora, Jannett Oporto, dijo que cuando se comenzó con la investigación se tomó algunos parámetros en cuanto a la situación que creó la pandemia del Covid-19 en cuanto a cómo acceder a las fuentes.
“Verificamos que había un 71% de mujeres con detención preventiva. Eso cobró fuerza en las declaraciones de las mujeres que, respecto a la cantidad de años que ellas estaban con esa medida, que no avanzaban sus procesos, que tenían problemas con la defensa pública, que no tenían recursos para abogados, que había estafas de los mismos abogados, y eso cobraba fuerza con los datos que teníamos”, dijo Oporto al medio digital.
La investigación
De acuerdo al documento, en Bolivia hay 1.072 mujeres en los penales femeninos que están distribuidos de la siguiente manera: en La Paz hay 262 mujeres en prisión; Santa Cruz, 374, Cochabamba; 180, Oruro, 91; Potosí, 45; Tarija, 43; Beni, 28 y Pando con 12 mujeres en prisión.
“He permanecido en el COF de Obrajes de la ciudad de La Paz 4 años en situación de detenida preventivamente y he vivido en carne propia el abuso de poder y su influencia en los administradores de Justicia” (Rosita) “Soy extranjera, me enamore de un boliviano que me maltrataba, murió en el hospital. Estoy detenida preventivamente 6 años. Si te defiendes terminas en la cárcel” (Vanesa)”, son dos testimonios que recoge el texto.
Asimismo, según la Dirección de Régimen Penitenciario, indicó que hasta marzo del 2021 existían mujeres extranjeras que estaban en los penales de manera preventiva. “En todos los recintos de Bolivia estaban recluidas 39 extranjeras: 8 mujeres de Colombia, 7 de Brasil, 7 de Chile, 5 de Perú, 3 de Argentina, 2 de Uruguay, México y China respectivamente y 1 mujer de Portugal”.
“Los trámites estaban paralizados, los abogados no podían entrar, “y cuando entraban sólo era para pedirnos plata; nuestros familiares no podían venir ni hacer seguimiento a los trámites, nadie podía salir a las calles, estábamos encerradas tratando de salvar nuestras vidas y ayudándonos entre nosotras” (Beatriz)”, señala la investigación.
Por otro lado, también se evidenció que muchas de las mujeres en los penales femeninos viven con sus hijos y que en muchos casos son cabeza de hogar.
“En el Centro de Orientación Femenina de Obrajes, de la ciudad de La Paz, uno de los cuatro que existen en el país construidos solo para mujeres, hasta marzo de 2021 estaban recluidas 199 privadas de libertad. Es un reciento que fue construido en 1957 y tiene capacidad de albergar a 245 mujeres. Entre las 199 reclusas estaban mamás de 18 niños: 3 lactantes, 8 entre 1 y 2 años, y 7, de 3 a 6 años”, señala el documento.
“He vivido 7 años en la cárcel con mis 5 hijos. Justicia para los pobres, para la gente de escasos recursos es impensable” (Eulalia)”, es uno de los testimonios que recogió Oporto.
La investigación completa se la puede leer en Mujeres Privadas de Libertad.